Los Juegos Olímpicos de París 2024 representan una gran oportunidad para las marcas que buscan llegar a la Generación Z, un segmento de mercado con una influencia de compra de 7.000 millones de dólares. Sin embargo, conquistar a esta generación no es sencillo. EXTE ha analizado las claves de las estrategias online que permitirán a las marcas ganarse un hueco en el podio de los consumidores durante este evento deportivo.
Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 marcaron un hito en la transformación digital de la cobertura deportiva. Aunque la televisión sigue atrayendo a millones de espectadores en todo el mundo, los medios digitales se han convertido en la puerta de entrada para los aficionados más jóvenes. Estas nuevas preferencias de consumo obligan a las marcas a adaptar lenguajes y formatos para llegar de manera efectiva a esta audiencia durante la gran cita deportiva.
De hecho, el Comité Olímpico Internacional (COI) registró 6.100 millones de interacciones digitales en las redes sociales de los Juegos Olímpicos durante la competencia de Tokio. Esto representó un aumento del 74% en el número de espectadores digitales en comparación con los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Nuevas disciplinas olímpicas como el breakdance, que se introduce por primera vez en París 2024, junto con el skate y el surf, que se incluyeron en Tokio 2020, son un gran atractivo para una audiencia que actualmente representa el 25% de la población mundial y que conformará el 27% de la población activa en 2025.
El vídeo sigue siendo el formato predilecto. En Tokio se registraron 28.000 millones de reproducciones de vídeo digital, lo que supuso un aumento del 139% en comparación con Río 2016. En 2024, es evidente que el vídeo seguirá siendo uno de los formatos protagonistas, ya sea con formatos out-stream integrados en el contenido o con anuncios in-stream como preroll o midroll.
«Los formatos breves, de un máximo de 6 segundos, están diseñados para lanzar un mensaje de forma directa y concisa, captando la atención del usuario en el menor tiempo posible. Estos vídeos se alinean con las preferencias de consumo rápido de la Generación Z y permiten a las marcas maximizar su impacto en un entorno digital competitivo» explica Álvaro Pastor, CMO de EXTE.
La innovación tecnológica a través de herramientas como la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático (ML) está revolucionando el marketing. Su aplicación en el análisis de datos permite una segmentación más eficiente y precisa y un rendimiento optimizado en tiempo real de las campañas. Las creatividades adaptadas permiten personalizar al máximo los mensajes.
Otras herramientas como la gamificación enriquecen la experiencia publicitaria. «Los formatos interactivos permiten a los usuarios dialogar de manera activa y proactiva con las marcas, propiciando la creación de relaciones más profundas y aumentando el engagement» continúa diciendo Pastor.
Además, la cobertura de los Juegos Olímpicos ya no se limita al deporte. La Generación Z ve cada vez más posibilidades de activismo y utiliza los Juegos para poner de relieve cuestiones sociales y políticas. París 2024 promete unos Juegos responsables, sostenibles e inclusivos, ofreciendo una oportunidad única para impulsar nuevas iniciativas sociales.
«Los centennials se caracterizan por ser una generación que busca conexiones reales, reivindican su identidad, su diversidad y se preocupan por cuestiones sociales. La heterogeneidad de esta audiencia obliga a las marcas a profundizar en sus intereses, preferencias y preocupaciones, mediante contenidos auténticos, personalizados e interactivos que les impactan en el momento exacto», concluye Pastor.
El verano del deporte se presenta como una oportunidad única para captar audiencias globales y comprometidas. En un mercado saturado, la relevancia y el contexto se tornan esenciales, y la combinación adecuada de creatividad y tecnología podría ser la clave para llevarse la medalla de oro en el marketing olímpico.
