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En una sorpresiva revuelta en el sector tecnológico, Adobe ha anunciado que cancela su propuesta de adquisición de Figma, una destacada plataforma de diseño de productos, por un valor de 20 mil millones de dólares. Esta decisión se debe a la creciente presión de los organismos reguladores del Reino Unido y la Unión Europea.
Como resultado de esta terminación del acuerdo, Adobe deberá pagar una penalización de mil millones de dólares a Figma. Shantanu Narayen, presidente y CEO de Adobe, señaló que, aunque ambas compañías compartían una visión común para el futuro del diseño y la productividad, optaron por continuar sus caminos de forma independiente.
La preocupación principal de los reguladores era que la adquisición de Figma por parte de Adobe podría limitar la competencia y la innovación en el mercado del software de diseño. Incluso después de que Adobe rechazara las medidas correctivas sugeridas por los reguladores, la presión continuó aumentando, llevando a la suspensión de la investigación por parte de la Comisión Europea tras el anuncio de Adobe.
El CEO de Figma, Dylan Field, expresó su decepción, mencionando que a pesar de los esfuerzos y las horas dedicadas, ya no veían un camino hacia la aprobación regulatoria del acuerdo.
Este desarrollo subraya la creciente vigilancia de los reguladores en grandes fusiones y adquisiciones en el sector tecnológico, destacando los desafíos para las empresas en el actual entorno legal y competitivo.